20.11.18

Hubiéramos. Querido!


Sinceridad o banalidad si acaso digo que podríamos cabalgar sobre el azul de este cielo que nos cubre y en las estrellas al amanecer después de cabalgar salvajemente, exhaustos en la montura, explotaría el universo con seguridad y los rayos y truenos y las constelaciones de nuevo nacerían y en menos de 7 días Dios volaría para crear al mundo. 
Maravillas de la naturaleza, fauna de los enamorados, auténtica orfandad en el inmenso hueco de la historia. Sin embargo alguien más planea por nosotros el simple chasquido del amor y del espejo, por eso es que callamos los hijos del silencio y en los adioses borramos con el codo. Pero Dios todo lo ve y como todo lo ve y no es casualidad, partirá el pan para nosotros y seguro es que, antes de que cante el gallo seremos dos al traspasar de luto, los oscuros secretos de esta noche.